En el marco de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, comparto con ustedes algunos #mitos sobre la #LACTANCIA. Estoy segura que todxs en algún momento hemos oído o repetido alguno de ellos.
Recordemos que el elegir amamantar o no debe ser un deseo personal y no un mandato social, familiar, contextual. La lactancia materna o humana es una opción, NO la única. Eso también es un mito y entre todxs lo estamos derribando.
Lo importante es contar con información y contención además de profesionales idóneos que acompañen a quienes deseen lactar y que también lo hagan con quienes no lo deseen por el motivo que fuera. Más contención y menos opinólogues.
Dar la teta duele.
Obviamente amamantar se trata de un proceso complejo, en el que intervienen distintos factores hormonales, psicológicos y sociales, pero no es real que duela. Si duele es necesario consultar con un profesional como una puericultora. Será importante trabajar en un proceso para lograr el buen acople.
Sólo las mujeres pueden amamantar.
Si bien estamos en el marco de lo que se da por llamar Semana Mundial de la Lactancia Materna, tal vez debería ser más correcto hablar de Lactancia Humana o algún otro término más inclusivo, ya que los varones trans y les no binaries también pueden amamantar. Lo único a tener en cuenta es que hormonas consume si es que las consume, su hubo intervención quirúrgica en mamas, y obviamente como en todos los casos, si lactar es un deseo.
Hay que amamantar cada 3 horas.
Nuevamente se trata de ver el caso por caso, entendiendo que a veces utilizar horarios muy rígidos puede implicar no respetar la necesidad de ese bebé, o generar aficiones en los pechos de quien amamanta. Más que amamantar cada 3 horas, pensemos en lactancia a libre demanda siempre que se pueda, y obviamente teniendo en cuenta variables como el peso de ese bebé.
No podés amamantar estando embarazada.
Cuando una persona amamanta durante el embarazo o bien a dos hijxs al mismo tiempo hablamos de LACTANCIA EN TÁNDEM. Mientras el embarazo se curse sin riesgo de aborto o parto prematuro, no debería generar un prejuicio en la salud. Ante una duda, siempre consultar. Pero es importante informar a quien lacta sobre la doble demanda, y luego de un parto continuar con la lactancia en tándem priorizando la ingesta de ese bebé recién nacido, y siempre generar redes de información y contención.
No podés amamantar si tomas medicación.
Uno de los mitos más comunes, y tal vez el que más escucho en el consultorio, es que ingerir medicación pareciera ser sinónimo de destete. Muchísima medicación es compatible con la lactancia, y si no lo fuera junto al profesional que indica la medicación se deberá buscar una alternativa y evaluar riesgos y beneficios de esta ingesta. Incluso en lo relativo a psicofármacos o medicación psiquiátrica hay mucha medicación compatible. Lo importante es encontrar profesionales idóneos y con formación específica en psicología perinatal.
Este es sólo un pequeño recorte, con algunos pocos mitos, pero lamentablemente son muchísimos más los que oímos y también los que en algún momento dijimos. ¿ Se te ocurren otros?
Por Lic. Marianela Santillán